Por culpa de su brazalete SCRAM Lindsay Lohan no puede broncearse

Lindsay Lohan no es la única que siente que el brazalete SCRAM le está haciendo la vida imposible, sino que la gente alrededor de ella está empezando a sentir que viven también una maldición.

Lindsay Lohan está "llena de ansiedad" por tener que estar usando el aparato de monitoreo SCRAM. Ella solía trasnochar y beber alcohol para combatir el estrés y ahora su único escape es el Red Bull.

Sin embargo algunas fuentes cercanas a la estrella indican que la fuente del problema es que el brazalete SCRAM está irritándole la piel. "Está haciendo de la vida de la gente a su alrededor un infierno ya que está sufriendo"

Además, varios han indicado que la gente le ha dicho a Lindsay Lohan que no puede rociarse con sprays para broncearse mientras usa el brazalete, porque el químico del bronceador puede provocar una lectura en el SCRAM que la interprete como presencia de alcohol.